No soy lo que pensabas...

No, no soy lo que pensabas. Soy algo mejor.

Y lo siento si te decepcioné. Si no cumplí con tus expectativas o si no demostré lo que debí haber demostrado.

No estoy listo aún para enseñarte todo. No quiero aún enseñarte todo. Por favor, ten paciencia y espérame. Deberías ver lo que soy capaz. Aún no lo muestro porque, a decir verdad, y no quiero que te ofendas, no sé si valga la pena enseñártelo.

Sabes que ella aún no sale de mí. Sabes que aún me da miedo hacer lo que hacía por ella. Espera. Es todo lo que pido.

No me tienes a tus pies. Simplemente me gustas mucho.